Por Francisco ALEJANDRE
Hombre de pocas palabras, pero poseedor de un corazón enorme, así es Javier Barajas.
El altruismo lo lleva en la sangre, el dolor humano lo conmueve, eso lo llevó a ofrecer una recompensa a quien diera informes para localizar al responsable de haber privado de la vida y luego depositado el cuerpecito de quien las autoridades policiacas denominaron: “Baby Jane Cordova Doe”.
El terrible suceso sacudió la conciencia de la comunidad local hace 10 años, el 12 de enero de 2006.
En una breve ceremonia realizada el pasado lunes 18 en el restaurante Lindo Michoacán de la Desert Inn, Javier Barajas entregó un cheque a Lesley Brianne Figueroa, la hermana de Crystal Pérez que al cumplir los 18 años de edad cubre los requisitos para obtener la recompensa ofrecida por la Fundación Lindo Michoacán, que preside Javier Barajas.
Cabe mencionar que el monto de la recompensa ascendió de 10 mil a 30 mil dólares, por el tiempo que estuvo en el banco y por inversiones que Barajas hizo para que subiera de acuerdo con el ritmo inflacionario.
“Hace 10 años nos involucramos para ayudarle a las autoridades a encontrar al presunto responsable del incidente, ofrecimos 10 mil dólares de recompensa para quien diera informes del caso, pero no hubo nadie que calificara. Entonces decidimos darle el dinero a Lesley, la hermanita de Crystal, quien contaba con seis años de edad en ese momento, ahora, con 18 años de edad recibirá un cheque por 30 mil dólares”, comentó Javier Barajas, agregando que “ella va muy bien en la escuela, tiene necesidades de transporte, computadora y demás enseres académicos, esto le va a ayudar mucho a terminar una carrera universitaria, quiere llegar a ser una brillante abogada”.
Estoy seguro que utilizará el dinero de una buena manera, de una manera productiva, afirmó.
“La Fundación Lindo Michoacán no está activa, sin embargo, con acciones como esta nos motivamos para seguir ayudando a los niños, será un impulso para canalizar nuestros esfuerzos en procurar cuidado para los niños”, aseveró, enfatizando que “ellos en muchas ocasiones no se pueden defender, nosotros tenemos que cuidarlos. Espero que la fundación se reactive con esos propósitos, ya que como padre de familia entiendo perfectamente lo que nuestro niños significan”.
Todos tenemos la necesidad de proteger a nuestra niñez, con unidad es posible ofrecerles un mundo de seguridad. “Si no pueden cuidar a los niños, si no son de sangre, les pido que no les hagan daño, mejor llévenlos a un lugar donde los atiendan, ellos merecen una oportunidad de ser felices”, terminó diciendo el presidente de la Fundación Lindo Michoacán.
Por otro lado, en charla exclusiva con este semanario, Lesley Brianne externó que “tengo planes de inscribirme en la universidad Northridge, de California. Arreglando mis papeles mi abuelita, Lilia Pérez, me explicó que Javier Barajas había donado 10 mil dólares para mi hace 10 años, contacté a Javier y me dijo que era cierto, que además tenía ganas de conocerme, después empezamos a planear este evento y ahora estoy aquí, muy agradecida con él y la Fundación Lindo Michoacán”.
La jovencita reconoce que es muy importante la aportación, sin embargo proviene de un hecho que le ocasionó mucho dolor, “no me gusta mucho hablar de eso, estoy contenta porque también se ayudará a mi abuelita, que me ha cuidado durante todos estos años. Estoy muy agradecida con Javier Barajas. Mi vida dará un giro positivo muy radical, espero que inspire a los demás, la generosidad de la gente es muy necesaria”, afirmó.
“Mi familia es fundamental, ha sido parte esencial de mi existencia, mi tía me ha influenciado para estudiar sociología y aplicar mis conocimientos en “law enforcement”, para ayudar a otros niños que se sientan solos o que sean abusados. Quiero compartir mi experiencia para ayudar a otros”, señaló Lesley.
Esto que hizo Javier Barajas por mí, quisiera hacerlo yo en el futuro con otra persona, como una forma de mostrar mi agradecimiento a él y a la vida, concluyó.
