Por Roberto PELÁEZ
Gabriel Mirada lo tiene bien claro, pese a practicar futbol desde los cinco años, jugar temporadas con el laureado cuadro LVSA Silver 03, con el que llegó a proclamarse campeón nacional, no las tiene fácil, tiene que entrenar fuerte, excederse en las prácticas para convertirse en titular en el Real Salt Lake Academy, y hacer realidad sus aspiraciones.
En Las Vegas jugó siempre con la playera número 10, lo que resulta un compromiso, más para un medio campista central que soñó ser como Diego Maradona o Xavi Hernández, “por su visión de juego, sus pases precisos, el toque mágico del balón, pero hoy me inclino más por el brasileño Neymar, he visto mucho más a Neymar, que es un medio capaz de desdoblarse como atacador”, apunta.
Quienes han visto a Gabriel sobre la cancha destacan su técnica, su drible fino, el control del balón, su entrega, el entrevistado reconoce que le apasiona el futbol, “y más aun la posición como ‘armador’, me gusta, dice, adelantarme a las jugadas, saber hacia dónde va a ir el balón, dónde están mis compañeros, a quién debo hacer llegar el balón... es como adelantarse al juego y eso es algo que me atrae”.
Recuerda sus inicios en el seleccionado ‘Quetzal’, de la mano del entrenador Rony Márquez, “después, abunda, paso por Barcelona y Tuzos, hasta incorporame a Las Vegas Sport Academy Silver 03, con mi papá Manleo Miranda al frente, de él trato de ‘heredar’ su amor por el futbol, la disciplina en los entrenamientos, su exigencia, y la confianza en los jugadores... nunca me trató diferente por ser su hijo, y me lo dijo desde el primer día: hay que ganarse la titularidad, eso me motivó a tratar de ser ejemplo en todo”.
Por el talento, Gabriel es convocado para formar parte del Real Salt Lake Academy, “es un escalón superior, es mayor la exigencia, apunta, he interiorizado que debo darlo todo, no puedo llegar y ser uno de los 11 primeros, sin embargo no desmayo, sé que me lo tengo que ganar.
“Junto a mi están otros jugadores provenientes de LVSA Silver 03 como Abel Mendoza y Daniel Rojas, quienes también se ganaron su convocatoria... para serle sincero, a ningún futbolista de LVSA Silver le han regalado nada, todo ha sido difícil, menos unirnos en torno al técnico y ser una familia, entregarnos hasta convertirnos en campeones de los Estados Unidos, se dice fácil”, comenta sonriente.
Lejos de la familia, los jugadores de LV se esmeran, hacen el mayor esfuerzo para convencer a los entrenadores.
“No podemos decepcionar a nuestros padres, a los hermanos, los abuelos, a los seguidores del equipo... llegamos hasta aquí y sólo debemos mirar hacia delante para mañana estar aun más lejos”, externa Gabriel, ahora con la playera marcada con el número 25.
