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“En tiempos tan complejos para la humanidad y las familias migrantes, debemos demostrar entereza, disciplina y resiliencia ante la adversidad, esas son las mejores cualidades de nuestra comunidad, y les pedimos cuidarse para volvernos a encontrar”, resalta el saludo enviado por el Consulado de Ecuador en Los Ángeles a los ecuatorianos residentes en Las Vegas, en ocasión del advenimiento de un nuevo año.
“Estamos muy agradecidos por el gesto, y ratificamos que pese a las dificultades por esta enfermedad que nos afecta a todos en mayor o menor medida, seguimos adelante uniendo a las familias, ayudando a la comunidad, y una prueba de ellos fue nuestra actividad del miércoles en que hicimos llegar nuestra ayuda a los niños más necesitados”, respondió Nora Uribe, quien desde hace varios años lidera al Club Ecuatoriano de Las Vegas.
Los ecuatorianos asentados en el valle no son tan numerosos como los mexicanos y salvadoreños, sin embargo mantienen un trabajo significativo, más que todo en defensa de sus raíces y tradiciones, incluso hacen llegar ayuda a niños desposeídos en su país.
Uribe aprovechó la oportunidad para agradecer la labor de sus connacionales María Baker, Silvia Fernelius, Susy Oviedo, Bibi Castagneto, Mari Jepson, además de otras integrantes del Club que se crecen literalmente en los momentos más complejos y están siempre dispuestas a brindar ayuda y tomar parte en los múltiples eventos que organizan.
Baker y Castagneto, por poner un ejemplo, han viajado hasta Ecuador para llevar ayuda, específicamente dirigida a los niños de familias con escasos recursos.
“Agradecemos el saludo del Consulado en Los Ángeles y confiamos en que el próximo año sera mejor para todos, específicamente en lo concerniente a la salud”, destacó Nora Uribe.
