Por Roberto PELÁEZ
Tras ‘sacudirse el polvo del camino’, a su regreso de Miami, el ecuatoriano Edwin Saldarriaga accede a ofrecer sus impresiones para los lectores de El Mundo, “leí recientemente un texto en que se reconocía a los bolivianos del valle porque dan a conocer y promueven su cultura, sus platos típicos, sus danzas, la manera de vestir en dependencia de la zona de aquel país, y me parece muy bien, asevera, la distancia no es justificación para olvidar lo de uno, debe ser una motivación enseñarlo a las nuevas generaciones”, considera.
“Voy a Miami para unas consultas médicas, comenta Saldarriaga, sin embargo eso no me impide ver cómo abunda allí, casi en todas las esquinas el café cubano, el famoso sandwich, los pastelitos de guayaba, por platicar solo de algo que distingue a los cubanos, precisa.
“Precisamente por eso es tan relevante que la gente valores el trabajo del Club Ecuatoriano de Las Vegas, resalta, cuando este servidor lo lideraba, y desde hace algunos años Nora Uribe y su equipo, la organización propicia que puedan venir figuras muy conocidas de la cultura de nuestro país, por un lado, y por otro, pues exhibimos vídeos sobre la arquitectura, la flora y fauna ecuatoriana, un material bien hecho, instructivo, más que todo”, sostiene.
“A veces falta información, dice, por un lado, y por otro no hay mucho interés y deseos de aprender, de estar al tanto de lo que ocurre, tan solo pregunte quiénes son José Cedeño Barre y Duvan Kangá, dos ecuatorianos que son campeón y subcampeón mundiales de taekwondo, eso nos llena de orgullo, son figuras sobresalientes.
“Personalmente creo que de Ecuador se sabe poco, la Universidad de Quito, por poner un ejemplo, es de las más antiguas de América; Islas Galápagos también es un atractivo tremendo, impresionante, con sus tortugas, los albatros, las iguanas, comenta, todo es hermoso”.
Atiende unas llamadas telefónicas y luego retoma la plática, “pues gracias al interés del Club Ecuatoriano nos han visitado personalidades de la cultura, una de ellas la doctora, periodista, locutora Blanca Salazar, que aquí presenta uno de sus libros sobre medicina que tiene ya muchas ediciones porque se agota, es una excelente conversadora, muy instruida.
“También nos visita la poetisa Ruth Bazante, que escribe unos versos eróticos magníficos; el joven Franz del Castillo, un caricaturista de fama mundial, es muy rápido, acude también a una invitacion nuestra el músico Hernán Gil con su orquesta, o sea, que hemos tenido la oportunidad de compartir con figuras de relieve dentro de la cultura ecuatoriana.
“Y en deporte, prosigue Saldarriaga, no son solo los taekwondocas, hay futbolistas buenos, reconocidos, como Alex Aguinaga, Agustín Delgado, Antonio Valencia, entre otros, y el marchista Jefferson Pérez, que asiste a cinco Juegos Olímpicos... recientemente ya usted lo sabe, el ciclista Richard Carapaz se impone en el Giro de Italia, esa no se la esperaba nadie, se imagina, un ecuatoriano que le da a los pedales más rapido que los demás”, expresa sonriente.
“Todo eso es bueno saberlo, sobre todo los ecuatorianos, comentarlo a la comunidad, esa es nuestra identidad, lo que nos identifica, uno siente que se eleva el autoestima, un orgullo de ser ecuatoriano, y conoce, puede platicar de algo, explicarlo”, subraya este hombre inquieto que tengo delante, graduado de la universidad pese a estar privado del sentido de la vista.
