Por Roberto PELÁEZ
“El objetivo primordial de la ‘Fundación Tené Fe’ es ayudar a cualquier persona de la comunidad que haya experimentado la pérdida de un familiar o un amigo; pretendemos guiarlas, consolar a quienes están frente a un difícil proceso de duelo y dolor, sin importar las circunstancias y la magnitud de la pérdida”.
Las palabras anteriores corresponden a Dina Romero, fundadora de ‘Tené Fe’ el pasado 11 de enero, quien perdió a su hijo Nelson A. Martínez Romero, un joven con unas ganas inmensas de vivir, ligado a la música, a quien muchos llamaban ‘El Tigre de la salsa’.
“No nos limitamos a brindar ayuda, más que todo espiritual, a personas de Las Vegas que atraviesan un momento doloroso y necesitan palabras de consuelo, precisa Romero, recientemente (el 30 de mayo) visitamos el hospital San Juan de Dios, de San Miguel, en El Salvador, donde trabajé por muchos años como enfermera, abunda; agradecemos a Carlos Rodesno y a su madre, también a Juan Pablo Espinoza, quienes nos acompañaron durante la visita a esa instalación hospitalaria”, resalta la entrevistada, de origen salvadoreño.
”Para mí, argumenta, la visita al hospital fue algo relevante, no olvido mis años de labor, la enfermería es algo muy noble, exige mucha sensibilidad, una debe entregarse a los adoloridos, y estar en esa instalación, ahora como fundadora de ‘Tené Fe’, es algo muy hermoso, emocionante, platicamos con los padres de muchos niños, los motivamos en medio de la angustia que experimenta quien tiene a un ser amado ingresado en un hospital”, sostiene.
“Pudimos ver de primera mano, sin intermediarios, sin que alguien nos cuente, subraya Romero, las necesidades y carencias de los niños, es una realidad muy triste... eso nos motiva a ampliar el quehacer de la ‘Fundación Tené Fe’, de alguna manera le vamos a hacer llegar mochilas y zapatos a los niños de un lugarcito llamado Gualoso Chirilagua, en El Salvador.
“Acá en Las Vegas, prosigue, nos reunimos con personas que han pasado o enfrentan la pérdida de un ser querido, apunta, como madre, remarca, es una de las formas de ayudar a mitigar la ausencia de mi amado hijo Nelson, a quien nunca podré olvidar.
“Mientras que en el plano familiar, añade, acercarnos a esas personas, alentarlas, nos ayuda sobremanera, dice, pues no se puede olvidar en ningún momento que esta es una organización con poco más de seis meses de fundada, la integra un pequeño grupo de personas, y fue creada desde el fondo del corazón de una madre en duelo”, expresa Dina Romero con la voz entrecortada y no puede evitar que las lágrimas nublen su vista.
