Por Roberto PELÁEZ
Es preciso vacunarse, acceder a la inmunización refuerzo (sobre todo los mayores de 50 años), y usar mascarillas en lugares públicos cerrados, son indicaciones de las autoridades de salud, ante afectaciones de la subvariante del Ómicron denominada BA 5.
Ante todo ¿qué es BA 5? Se trata de la más reciente subvariante de Ómicron, aparecida a finales del año pasado, con una enorme ola de infección. Según los especialistas es la peor versión del virus que se ha visto.
El llamado de las autoridades de salud en el sur de Nevada se sustenta en lo acaecido en los últimos días: más de 4 mil nuevos casos, muchas personas reinfectadas, y miles de hospitalizados, justifican las indicaciones. Un calculo permite afirmar que 4 mil casos en siete días arroja un promedio de 570 casos diarios.
“Los números de hospitalizaciones y fallecidos, apuntan, no son más altos por la cantidad de personas que accedieron a las inmunizaciones”.
Las vacunas no evitan la transmisión, sin embargo inciden en que las afectaciones no sean tan severas.
No se vale bajar la guardia, relajarse, la evolución de esta subvariante le permite propagarse o contagiar más rápidamente, además de evadir la inmunidad. “Es significativo cómo puede esquivar el sistema inmunológico del organismo”, aseveran los expertos. En la concreta, se trata de una variante altamente infecciosa, lo que es un imperativo para que las compañías fabricantes de vacunas modifiquen las dosis llamadas de refuerzos para que ganen en efectividad ante las sbvariantes más recientes. Quienes hayan sido contagiados por el Covid 19 no están exentos de volver a enfermar.
Las autoridades del Distrito de Salud del Sur de Nevada insisten en que las personas deben vacunarse, acceder a las inmunizaciones refuerzos, además de usar mascarillas, y desinfectar, sin llegar a las medidas de cuando el Covid 19 estaba en su apogeo, es preciso cuidarse, fortalecer el sistema inmunológico, comer sano y hacer ejercicios.
Hasta ahora una de las características de la mencionada subvariante es que trae consigo un elevado número de contagios (y hospitalizaciones), y no se comporta igual con las cifras de fallecidos, que resultan más bajas. Se ha expandido rápidamente por más de medio centenar de naciones, incluyendo Estados Unidos.
