Por Alexander ZAPATA
“Hoy regresas siendo residente de este país. Felicidades mamá”. Esas fueron las últimas palabras de Eric Avelar Gómez al despedir a su madre quien iría a una cita de inmigración para obtener la residencia en los Estados Unidos. Sin embargo al llegar a la oficina de USCIS en la ciudad de Las Vegas, Nevada, su sorpresa fue mayúscula.
Oficiales de la oficina de ICE la esperaban y sin mayores razones la arrestaron y la pusieron en un proceso acelerado de deportación.
“No puedo creer que estemos viviendo esto. Parece irreal”, fueron parte de las palabras de Eric en una rueda de prensa organizada por distintas agrupaciones pro inmigrantes que hacen vida en Las Vegas y que al saber del caso de esta madre, se activaron para abogar por su liberación.
Las razones
“20 años atrás, Cecilia Gómez fue incluida en una petición familiar de asilo que finalmente fue descartada por no tener suficientes fundamentos”, explicó Bliss Requa, del Centro de Trabajadores de Las Vegas. “El problema fue que Cecilia acudió con una notario que se hacía pasar por agente de inmigración. Esta notario, de nombre María Romero, fue arrestada por este delito”, agregó la activista.
“Cecilia debió recibir una cita a corte vía correo, pero por el contrario nunca llegó. Y es que esa notificación fue enviada a lo que hoy es una tienda de donas, esto por la incompetencia de esta notario”, agregó Requa. Esta ausencia en cortes generó que Cecilia recibiera una orden de deportación, una orden que ni ella ni su familia tenían en cuenta.
Luego de ser detenida, Cecilia comenzó un proceso acelerado de deportación que incluyó el traslado a tres estados en tan sólo dos días. “Ella fue arrestada el miércoles 4. De inmediato fue llevada a Colorado, luego a Texas y después a Arizona” explicó Requa a los medios.
Sin embargo, gracias a la acción de su abogada y a la ayuda de oficiales electos el proceso de deportación logró ser detenido mientras el caso es nuevamente atendido por un juez de inmigración.
Uno de los aspectos que mayor notoriedad dio a este caso, estuvo no sólo en la manera como se dio el arresto sino la manera en la que actuaron los oficiales de ICE. Según Requa, “Cecilia fue abruptamente golpeada contra una mesa, dejándole hematomas en su cuerpo”, todo esto luego de que la mujer hispana se negara a firmar documentos que los oficiales le habían entregado.
Inmediatamente USCIS y ICE ofrecieron su versión respecto al arresto y las denuncias de abusos presentadas. Maria Elena Upson, vocera de USCIS, no quizo dar detalles específicos del caso de Cecilia, pero explicó en un comunicado que “USCIS realiza entrevistas para determinar si los aplicantes son elegibles para algún beneficio. Dentro de este proceso ellos tienen la oportunidad de ofrecer mayores detalles de su caso para ver si pueden recibirlo, aunque también se toma en cuenta si existe alguna orden de deportación pendiente”.
Por su parte ICE negó que en el caso de Cecilia existieran abusos o violencia física. Según una nota publicada por el Canal KVVA-TV (señal local de Las Vegas para FOX) en un comunicado ICE dijo que estas denuncias son “falsas” y que esta oficina “tiene una política de cero tolerancia para conductas violentas”.
Finalmente el viernes 6 en horas de la tarde se conoció que Cecilia fue puesta en libertad aunque aún queda pendiente su caso ante un juez de inmigración. “Está libre bajo supervisión, lo que significa que tiene que acudir a citas de revisión con ICE de manera periódica”, explicó Laura Barrera, abogada de inmigración que lleva su caso, agregando que “lo importante es que Cecilia podrá seguir con este proceso en su hogar y con sus familiares”.
Respecto a la actuación de ICE y el caso de Cecilia, oficiales electos como la demócrata Jackie Rosen fijaron su posición. En un comunicado Rosen criticó la acción de la oficina de inmigración y destacó la labor de Gómez como parte de la comunidad de Las Vegas.
“ICE debe de enfocar su tiempo y recursos en los criminales curtidos quienes amenazan la seguridad de nuestras comunidades y parar de dividir a nuestras familias. Estas prioridades retorcidas son tan sólo otra señal de la imprudente agenda antiinmigrante de la administración de Donald Trump. El Congreso necesita aprobar inmediatamente una reforma migratoria integral para acabar con el temor y el sufrimiento de las familias en Nevada y por todo el país”, explicó Rosen.
Por su parte José Macías, de la organización Make The Road Nevada, que estuvo involucrada en la lucha por la liberación de Cecilia no ocultó su alegría por el resultado. “Es una gran victoria de la comunidad. Realmente la unión hace la fuerza. Desde cientos de peticiones hasta el respaldo de muchas organizaciones comunitarias vimos la unión de la comunidad. Ver una familia a punto de ser separada es un drama que viven a diario nuestras comunidades. Cecilia somos todos y tenemos que luchar por una solución permanente para no ver más lágrimas de separación”.
