Ola de calor afecta a Phoenix y Las Vegas

VALLE DE LA MUERTE, California, EE.UU. (AP) — Un calor abrasante sofocaba el sábado el suroeste de Estados Unidos, donde según pronósticos las temperaturas alcanzarían el fin de semana entre 46 y casi 49 grados centígrados (entre 115 y 120 grados Fahrenheit) en partes de Arizona, Nevada y California.

Los expertos dijeron que el calor podría igualar el sábado el récord de 47,2 grados centígrados (117 grados Fahrenheit) en Las Vegas. Phoenix alcanzó a media tarde 48,3 grados centígrados (119 Fahrenheit) y superó la máxima histórica correspondiente a un 29 de junio registrada en 1994 y grandes zonas de California estaban bajo alerta de altas temperaturas, que se espera se prolonguen hasta el martes por la noche y quizá más.

Dan Kail estaba de vacaciones en Las Vegas cuando se enteró que la temperatura en el Valle de la Muerte de California podría alcanzar este fin de semana 54,4 grados centígrados (130 Fahrenheit).

Kail no dudó en viajar hacia el punto desértico que es típicamente el lugar más caliente en la Tierra.

"Ir al Valle de la Muerte en el verano siempre ha estado en mi lista", señaló Kail, de 67 años y de Pittsburgh.

"Cuando supe que el calor podría alcanzar nueva marca alquilé un vehículo y me dirigí hacia allá. Si pasa los 54 grados centígrados (130 Fahrenheit) tendré de qué alardear", apuntó.

Según los pronósticos, el Valle de la Muerte alcanzaría el sábado 53,3 grados centígrados (128 Fahrenheit).

El Valle de la Muerte registró hace un siglo la marca histórica de 56,6 grados centígrados (134 Fahrenheit), la temperatura más alta registrada en la Tierra.

Un par de horas de camino hacia el sur, en Baker, estaba previsto que el calor subiera a casi 49 grados centígrados (120 Fahrenheit) en el oasis para viajeros en la interestatal 15 en el desierto de Mojave.

El tramo de gasolineras y restaurantes entre Los Angeles y Las Vegas es conocido entre los viajeros por un termómetro gigante que con frecuencia registra temperaturas muy elevadas.

En el restaurante Mad Greek, una camarera pedía que le surtieran órdenes de batidos de chocolate y fresa mientras las temperaturas rondaban los 44,4 grados centígrados (112 Fahrenheit) a la hora del almuerzo.

 

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