Por Roberto PELÁEZ
Pese a sus cortos 11 años, la vida de la niña Mariana Laudinot López puede muy bien ser tema de una película, de esas en que el protagonista se impone a las adversidades y se empina al estrellato.
Nacida en la provincia de Cienfuegos, al centro de Cuba, se enamoró desde pequeñita de la gimnasia artística, dio sus primeros pasos en la modalidad deportiva de la mano de las entrenadoras Bellamys Barceló y Katia Ramírez “le agradezco mucho, dice la entrevistada, siempre las recuerdo, a ellas le debo parte de lo que he conquistado hoy”.
Karina y Lérida, madre y abuela, respectivamente, también han sido pilares en la formación de la pequeña gimnasta “nunca me ha faltado su apoyo, han estado ahí para mí, además de mi papá, que desde Cuba, por teléfono, no deja de alentarme”, advierte.
Lérida, arquitecta y martiana, por más señas, vive en Las Vegas hace casi 10 años, en abril del 2022 experimentó la alegría de ver llegar a su hija acompañada de su nieta.
Es Karina quien explica: “salí de Cuba con mi hija, por lo que muchos llaman la ‘travesía’, en un mes atravesamos cinco países, fue en extremo difícil, pero no nos rendimos, vimos coronado el esfuerzo al llegar a este país y abrazar a mi mamá... ese abrazo compensó en gran medida todo lo que pasamos”.
Mariana se matriculó en la Pat A. Diskin Elementary (allí toma lecciones de quinto grado), y junto a su madre buscó enseguida un gimnasio donde pudiera proseguir las clases en el deporte que la apasiona.
“En la gimnasia artística, apunta, competimos en viga, piso, salto y barra asimétrica, además se suman los resultados en el ‘all around’, para quienes se desempeñan en todos los aparatos”.
Hasta el momento la entrevistada ha tomado parte en cinco competencias, ¡acumula 24 medallas de oro y una de plata! Lo cual si no es un record, de seguro resulta un buen average.
La madre lleva una especie de ‘hoja de servicios’ de su pequeña.
“Ha competido hasta ahora, comenta, en ‘Candy Cane Classic’, Lady Luck (en el hotel y casino Paris), el torneo Vegas Cup (Horseshoe Las Vegas), Heart of a champion (Pasadena, California) y en Viva Las Vegas... guiada por la entrenadora Stephanie, ha ganado todas las medallas de oro”, apunta orgullosa.
Mariana retoma la conversación y destaca: “En Cuba entrenaba de lunes a viernes, seis horas diarias, aquí sólo tres horas en tres días a la semana, allá era mayor el rigor, sólo estudiaba y entrenaba, lo aprendido en Cienfuegos me ayudó mucho, ahora voy perfeccionando, estoy agradecida de todas mis entrenadoras”.
Al referirse a las materias que estudia en quinto grado, expresa: “me gusta mucho la matemática, voy poco a poco con el inglés, y entre mis aspiraciones están ir a la universidad, estudiar una carrera, además de poder un día representar al equipo de los Estados Unidos en gimnasia, sería como un sueño... venir por ‘travesía’ y gracias a la dedicación, al talento, al trabajo de mis entrenadoras, competir por este país”.
