Si bien la ausencia de Simone Biles en los Panamericanos de Santiago 2023 dejan un regusto amargo en la competición de gimnasia artística, la confirmación de Jordan Chiles al frente del equipo estadounidense ilusiona, tanto como el reto que tiene ante sí la de Oregon de ganarse una plaza en París 2024.
Ejercerá de líder, como ya ha hecho en otras ocasiones previas, y su aval son sus éxitos, un campeonato del mundo y una plata olímpica por equipos, así como múltiples medallas de oro individuales.
Mientras Biles se ha concentrado en los campeonatos del mundo de Amberes como paso previo a París 2024, Chiles centra su progresión en Santiago, en la que será su primera participación en unos Panamericanos. El objetivo en Chile está muy claro, revalidar el primer puesto obtenido en Lima 2019 con ella al frente.
Los cambios de ritmo han protagonizado la vida de Chiles en los últimos años. Después de una carga enorme enlazando los Juegos Olímpicos de Tokio y sus temporadas universitarias con UCLA, más una en la élite, se tomó un respiro en mayo de este año para asistir al enlace entre su querida Biles y la estrella de los Green Bay Packers, Jonathan Owens.
Tomarse un descanso conlleva una bajada de rendimiento, y de este modo, los resultados más recientes no fueron como se esperaba. En el ‘US Classic’ del pasado agosto fue cuarta en barras asimétricas y décimo tercera en viga de equilibrio, además de culminar quinta en los Nacionales de Estados Unidos pocos días después.
Esto la llevó a quedarse sin espacio en la potentísima selección norteamericana para los Mundiales en Bélgica, pero Santiago aparece en el horizonte como la oportunidad ideal de redimirse y reclamar su puesto en París 2024.
Dice ‘Chick’, como la llaman los más cercanos, que lo que más le gusta de la gimnasia es “poder hacer cosas que los demás no pueden, como volar”. Ese amor y capacidad de mantenerse sobre el suelo quizás se lo deba a su nombre, una decisión de sus padres, que le pusieron Jordan en honor a la leyenda de los Chicago Bulls.
Competir y ganar en Santiago 2023 supone una bonita manera de homenajear sus diez años en el equipo nacional de Estados Unidos, con quien comenzó en 2013 en el equipo junior después de ser seleccionada al haber ganado el bronce en los nacionales disputados en Hartford, Connecticut.
Ganarse un puesto en el súper equipo estadounidense que competirá en París 2024 significaría también un excelente manera de recordar el que fue su primer oro por equipos con Estados Unidos, en 2014, en su primer campeonato fuera de su país, en Jesolo, Italia.
Junto a Kayla Dicello, Kalaya Lincoln, Zoe Miller y Tiana Sumanasekera, el equipo de Estados Unidos es el rival a batir en los Panamericanos de Santiago 2023. Pero para Jordan Chiles el paso por Chile significa mucho más, es la oportunidad de regresar al máximo nivel, el lugar que le pertenece. Redacción Deportiva (EFE)
