Por Roberto PELÁEZ
Quienes deseaban ver a Saúl ‘Canelo’ Álvarez plantarse frente a su rival, pelear al clásico estilo mexicano, salieron complacidos. Considero que ante Gennady Golovkin protagonizó el sábado 15 una de sus mejores presentaciones, solo que no le alcanzó para ganar... vi este combate más parejo que el primero, con ligera inclinación para el europeo.
Hay que apuntar que el jab de Golovkin molestó mucho a ‘Canelo’ Álvarez, y que éste terminó mejor, evidenciando una excelente forma física; no se puede poner a un lado el hecho de que el mexicano es ocho años menor y que se preparó para pelear en el terreno que el público le exigía. Nadie puede decir ahora que es cobarde ni que rehuye el combate, argumentos que se esgrimieron después de la pelea inicial con Golovkin.
Los dos brindaron en esta oportunidad un buen pleito, tal vez dejaron la escena lista para un tercer enfrentamiento, aunque ya el ganador manifestó su deseo de pelear en diciembre.
Hubo acción desde los primeros asaltos hasta el último, con algunos minutos de cautela para ajustes estratégicos, se vio bien a los dos, con Golovkin tirando mucho su jab, castigando, un ‘Canelo’ buscando el intercambio, y terminando mejor en el aspecto físico.
Dos jueces apuntaron 115-113 en favor de Álvarez, el tercero dio empate a 114, ninguno de los tres vio ganar al kazajo (?). Será que ven otra pelea, o están a años luz en conocimiento de boxeo respecto a algunos especialistas y aficionados, no acabamos de entender el sistema de puntuación, es una especie de ‘gallina de los huevos de oro’, sólo se le puede ganar por nocao... sea como sea, victoria del ‘Canelo’, es el campeón. Felicidades.
Es válido apuntar que el almanaque -en este caso- siempre va a favorecer al mexicano y ese es un aspecto que, reitero, no puede perderse de vista, pues ocho años de diferencia (28-36) pesan, cada vez que se vean las caras el mexicano va a apostar por una pelea larga y el kazajo querrá terminar antes del límite.
Dicho de otra manera, pese a ser un boxeador excepcional, el kazajo se encamina (por la edad) al descenso en su curva de rendimiento.
Lo visto sobre el ring hace que uno vuelva a creer en el boxeo, en su historia, sin embargo algunas decisiones le echan una paletada de lodo, y así no se vale, es como meterle la mano en el bolsillo al público.
