Spence Jr., frente a Ugás... tocar el cielo con las manos

Por Roberto PELÁEZ

Tras disponer de manera absoluta de uno de los grandes entre los grandes: Manny Pacquiao, el boxeador oriundo de Santiago de Cuba Yordenis Ugás -residente en Las Vegas- va a lo que muchos consideran la otra gran pelea de su vida, ante el favorito Errol Spence Jr.

El cubano, titular de la AMB, presenta balance de 27 victorias (12 antes del límite) y cuatro derrotas; el estadounidense se mantiene invicto en 27 presentaciones. Posee las fajas de la FIB y CMB.

Ambos tienen más de 30 años, lo que por supuesto trae ajustes en la preparación.

Ugás es un guerrero de pies a cabeza, ganó bronce en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, tres años antes conquistó medalla de oro en el campeonato mundial. Tiene en su esquina a Ismael Salas, también asentado en la ‘ciudad que no duerme’, un entrenador que lo ha ganado todo en el profesionalismo.

Conozco a Salas hace unas cuatro décadas, cuando él se abría camino en el boxeo guantanamero y yo tecleaba las primeras palabras en una vieja máquina de escribir.

Él entrenó a figuras que luego se impusieron en las citas de los cinco aros. Sé perfectamente que a pocos días del enfrentamiento -junto a su peleador- tiene previsto varios planes (a, b y hasta c), en dependencia de ‘lo que traiga’ el cotizado Spence Jr.

Ugás sabe perfectamente lo que debe hacer sobre el ring en cada momento, se mide a un rival complicado en extremo, que no por gusto luce condición de favorito, pero esto sirve a los dos cubanos como una especie de motivación extra.

¿Alguien duda de la calidad de Spence Jr.? Nadie. Tampoco se pone en tela de juicio el buen boxeo del santiaguero, heredero de una escuela que antes vio brillar a Rolando Garbey, Enrique Regüeiferos y Emilio Correa, ganadores de medallas de Juegos Olímpicos, leyendas en el amateurismo. De ahí viene la estirpe del hombre al que se medirá el estadounidense.

Se planta bien sobre el ring, exacto en su golpeo, voluntarioso, son los atributos de Ugás, cuyo triunfo inobjetable ante Pacquiao lo catapultó al estrellato.

¿Tiene argumentos el favoritismo de Spence Jr.? Sí, por supuesto, pero les advierto, no tendrá ni remotamente un ‘manjar’ delante de él, tendrá que echar mano a todo su arsenal si quiere imponerse. Ugás no le va a dar ni a pedir tregua, nunca lo ha hecho y este pleito del sábado 16 en el estadio de AT&T en Arlington, Texas, no va a ser la excepción.

 

Ambos contendientes están prestos a brindar un espectáculo cinco estrellas. De la fusión de un santiaguero y un guantanamero no es descabellado esperar un buen desempeño y el éxito.  Es cuestión de tiempo.

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