Por Roberto PELÁEZ
Tal y como se esperaba los peruanos asentados en el valle respaldaron las jornadas de servicios consulares que por dos días les permitió materializar gestiones y trámites ahorrando dinero y tiempo.
Una vez más el sólido vínculo entre la Cámara de Comercio Latina y la peruana, liderada por Arturo Amaya, permitió que los visitantes, procedentes de San Francisco atendieran a sus connacionales en los salones de la LCC.
“Recibimos a tres funcionarios consulares, explicó Amaya, quienes se esmeraron y realizaron una excelente labor en la atención a los peruanos que habían solicitado cita.
“Junto al trabajo de los funcionarios, quienes también consideraron oportuno transmitir información de primera mano, explicar a los connacionales diferentes detalles, sobresalieron Silvana Loli y Alberto Algendones, de nuestra Cámara, quienes de manera voluntaria atendieron a todos, merecen una felicitación.
“El vicecónsul Sergio Zapata, prosiguió el líder de la Cámara Peruana, tuvo a bien destacar la organización, el hecho de que tuviéramos en cuenta cada detalle para facilitar el trabajo de ellos y la estancia de los connacionales”.
En esta oportunidad los peruanos que acudieron para recibir servicios consulares, pudieron tramitar pasaporte, el Documento Nacional de Indentificación (conocido por las siglas DNI), autorización de viaje de menor, poder, supervivencia, entre otras gestiones.
En plática con algunos de los asistentes, ofrecieron sus impresiones a este semanario. “Estoy muy agradecido, apuntaron, la atención fue muy buena, aparte de no tener que ir a San Francisco, faltar al trabajo, pues no podemos menos que agradecer, tanto a la Cámara de Comercio Peruana, al vicecónsul Zapata... muchas gracias.
“Todo fluyó de manera excelente, atención magnífica, poco tiempo de espera, salimos complacidos, nos alegra que periódicamente vengan funcionarios consulares, nos ofrezcan servicios, platiquen con nosotros, respondan cualquier pregunta... reiteramos el agradecimiento”, resaltaron.
Los voluntarios Rossana y Renzo, junto al Chef Dante también estuvieron a la altura de las exigencias. “Pudimos hasta degustar comida peruana, los organizadores cuidaron hasta ese detalle”, advirtieron los asistentes.
En correspondencia con lo sucedido en las dos jornadas de trabajo (sábado y domingo más recientes), el vicecónsul consideró oportuno agradecer el apoyo brindado, extendió una felicitación a organizadores y voluntarios, además de dejar sentado que platicará con el cónsul general con la intención de volver con los servicios consulares el venidero octubre.
“Nos llena de orgullo la opinión emitida por el vicecónsul, y por supuesto la posibilidad de que puedan regresar en octubre, explicó Amaya, cada jornada de este tipo resulta de una ayuda significativa para los connacionales, además es una ocasión propicia para atender a los visitantes, mostrar la calidad del trabajo en condición de anfitriones, del voluntariado, y no puedo dejar de agradecer a la Cámara de Comercio Latina, a su presidente Peter Guzmán y a Carlos Gómez que nos tienden la mano... fueron dos jornadas magníficas”, finalizó Amaya.
