La misión que encaró la Guardia Nacional de Nevada como respuesta del estado durante las afectaciones por el Covid 19 llega su fin este viernes primero, luego de dos años de intenso bregar.
Dar por finalizada la tarea de la Guardia Nacional de Nevada es incuestionablemente la señal más reciente de la relajación gradual del estado en cuanto a las precauciones y políticas relacionadas con la pandemia.
Vale significar que en el pico más elevado del Covid, en su cúspide, se convocó a mil 139 integrantes de la Guardia de Nevada para apoyar al estado y a su gente. Resultó la respuesta de emergencia más significativa de su historia, en el plano doméstico.
Se pudo conocer que los miembros de la Guardia Nacional de Nevada administraron directamente 831 mil 227 pruebas COVID-19, además de 818 mil 661 vacunas, todo ello junto al hecho de apoyar en la transportación de alrededor de cuatro millones de libras de equipo de protección personal.
Es justo consignar que desde abril de 2020 la Guardia Nacional de NV redujo de manera gradual el número de personal que realiza operaciones relacionadas con el Covid 19, dando paso a las jurisdicciones locales hacia sus actividades continuas de pruebas, vacunación y rastreo de contactos.
“Los miembros de la Guardia de Nevada permanecen listos para ayudar a los residentes de Nevada cuando se les convoque nuevamente”, puntualizó Emerson Marcus, director de Operaciones Conjuntas y Domésticas de la Guardia Nacional de Nevada.
Por su parte el Coronel Brett Compston, quien funge como director de Operaciones Conjuntas y Domésticas de la Guardia Nacional de Nevada aseguró que en caso de otro aumento u ola de COVID 19 o sus variantes, podría haber una reactivación con -remarcó- simplemente una orden y algunos fondos.
De manera reiterada las autoridades del estado, diferentes grupos comunitarios, e incluso en el aspecto individual, tuvieron a bien pronunciar palabras de agradecimiento por el destacado, sobresaliente servicio prestado por los integrantes de la Guardia Nacional de Nevada.
