El pasado nunca vuelve, sólo deja recuerdos y buenos amigos... tal frase cobró vida recientemente cuando Alfredo Martínez y su esposa Elvia, dueños de ‘Tamales Doña María’ invitaron a algunos de los fundadores del ‘Club Social Mexicano’, la primera organización latina en Las Vegas.
Y como quiera que los grandes momentos son parte importante de los recuerdos, se reunieron Antonio Carranza y su esposa Loyda; Claudia (hija de los Carranza) y su esposo Gregory Price.
También acudieron Francisco Villanueva y Esperanza su esposa; José y Gustavo Gutiérrez, dueños de la tortillería ‘Los Arcos’, además de Sergio Salgado y María Escobedo (dueña del semanario El Mundo), quienes compartieron gustosos historias de los años ‘80.
Sin dudas una amistad que perdura en el tiempo es el reencuentro de viejos amigos, que dan paso a las anécdotas y ocurrencias.
Los presentes agradecieron las atenciones de Alfredo y Elvia, quienes no escatimaron esfuerzos para que todos la pasaran bien y se sintieran a sus anchas; fue una velada amena, para el recuerdo, porque justo es señalar que cuando viejos amigos se reúnen traen risas al presente. Los grandes momentos son parte importante de los recuerdos, y la única forma de hacer amigos es serlo.
Un verdadero tesoro es el de aquella persona que conserva a sus viejos amigos, pues los grandes amigos son como el mar, uno ve el principio pero no ve el final.
Cuántos recuerdos, cuentos e historias salieron relucir entre personas cuya amistad resiste el paso del tiempo, todo ello matizado por la sonrisa franca y los mejores deseos de quienes han superado obstáculos y consideran los éxitos y triunfos de sus amigos como suyos propios.
