Por Yazmín BELTRÁN
Arlene Rivera fue nombrada recientemente por parte del procurador general de Nevada Adam Laxalt como defensora (ombudsman) en asuntos relacionados con violencia doméstica y abuso sexual.
Entre sus labores, Rivera será el enlace entre la oficina del procurador general y las diferentes agencias y organizaciones en el estado encargadas de trabajar con víctimas de violencia doméstica, asalto sexual, explotación y tráfico humano.
“Queremos asegurarnos de que las víctimas obtengan todo el apoyo necesario, así como también enfocarnos en la educación, especialmente en nuestra comunidad hispana donde no hay muchos recursos en su idioma, pero sobre todo buscar castigos más severos para los cargos de violencia doméstica y especialmente en casos de reincidencia”, destacó Rivera.
Además de tener una carrera establecida de trabajo con diversas organizaciones para ayudar a víctimas de abuso, el tema de violencia doméstica es algo cercano a Arlene, ya que durante un período de su vida lo sufrió dentro su propio ambiente familiar.
“Para mi esto es un tema de humanidad, un tema de corazón y un tema de ayuda. Esto es una labor muy importante porque me permite servir a la gente que necesita apoyo pero que muchas veces no sabe dónde buscarlo”, aseguró.
De acuerdo a la Coalición Nacional contra la Violencia Doméstica (NCADV, por sus siglas en inglés), Nevada se encuentra dentro de los primeros cinco estados de la nación con un alto índice de víctimas de violencia doméstica, así como también ocupa en forma consistente el primer lugar en la nación con respecto a víctimas mortales de violencia doméstica.
En Nevada, las posibilidades de que una mujer sea asaltada por su pareja dentro de su hogar son mayores que el riesgo que enfrenta un oficial de policía de ser asaltado en el trabajo, y de acuerdo a datos del NCADV se estima que el 24.4% de las mujeres en nuestro estado será víctima de acoso a lo largo de su vida.
Nevada continúa figurando entre los primeros cinco estados por delitos que involucran crímenes de asesinato-suicidio perpetrados por una supuesta pareja; El 94% de las víctimas de estos crímenes son mujeres.
Rivera actuará como coordinadora a nivel estatal de las mejoras en todo el sistema en la prevención e intervención de estos crímenes, y trabajará para aumentar la responsabilidad de los autores.
“Abuso sexual, violencia doméstica, tráfico humano, son temas en donde las víctimas están viviendo bajo el miedo constante en distintas formas y a veces no ven la salida. Alguno de los retos para mí es buscar formas de expandir los diferentes programas de ayuda y crear campañas donde haya más información”, concluyó Rivera.
Sus funciones incluyen la supervisión del Consejo de Nevada para la Prevención de la Violencia Doméstica, Comité de Revisión de la Procuraduría General de la Violencia en el Hogar de Víctimas Mortales, y el Comité de Tratamiento Para Agresores de Violencia Doméstica.
