Por Roberto PELÁEZ
Muchos coinciden -datos en mano- que con el Covid 19 proliferaron o aumentaron de manera considerable los problemas de salud mental, que alcanzaron incluso a estudiantes de diferentes grados.
Para la comunidad hispana del valle resulta un aliciente poder contar con sicólogas como Mónica Rocca, Cory Ordóñez -tiene varios libros publicados-, Dulce Guzmán, Gisela de la Rosa y Margarita Romano, todas hablan español y tienen reconocida experiencia.
Dada la proximidad del Día de las Madres, es oportuno conocer la opinión, por ejemplo, de Ordóñez relacionada con la importancia de dar o recibir un abrazo.
“El abrazo, ese gesto tan simple y a la vez tan profundo, explica, constituye una poderosa herramienta que tiene beneficios significativos desde la perspectiva de la psicología. Más allá de ser una muestra de afecto o cariño, el abrazo tiene el poder de influir positivamente en nuestro bienestar emocional y físico, enfatiza la ecuatoriana asentada en Las Vegas.
Y prosigue: “Desde una edad temprana, los seres humanos buscan el contacto físico como una forma de conexión y seguridad, argumenta, hay que tener en cuenta que los abrazos liberan oxitocina, conocida como la ‘hormona del amor’, que promueve la sensación de calma y bienestar. Este efecto se refuerza aún más cuando los abrazos son dados por personas cercanas, lo que fortalece los lazos emocionales y la sensación de pertenencia”, puntualiza la entrevistada.
“En el ámbito de la psicología, comenta, el abrazo se considera una forma de terapia de contacto, que puede reducir el estrés, la ansiedad y la depresión; el contacto físico a través del abrazo libera endorfinas, neurotransmisores que actúan como analgésicos naturales y mejoran nuestro estado de ánimo. “Además, añade, los abrazos aumentan la autoestima y la sensación de seguridad en uno mismo, dan consuelo en momentos de vulnerabilidad; sus beneficios no se limitan a quien lo recibe, tienen un impacto positivo en quien lo ofrece.
“El acto de abrazar promueve la empatía, dice, la conexión emocional y fortalece las relaciones interpersonales. Es una forma de comunicar amor, apoyo y comprensión... sin palabras.
“El abrazo es más que un gesto físico; una expresión de amor, conexión y apoyo que tiene profundos beneficios para nuestra salud mental y emocional. Desde la perspectiva de la psicología, el poder curativo del abrazo nos recuerda la importancia del contacto humano y el valor de la conexión emocional en nuestra vida diaria”, sentencia.
La sugerencia de esta destacada escritora local, que ha presentado varios de sus ejemplares, es que no se debe escatimar a la hora de dar un abrazo, a un familiar, a un amigo, porque reporta muchos beneficios. Póngalo en práctica. Escuche a los profesionales.
