La denuncia colectiva por violación en contra de un famoso actor en Argentina impulsó acusaciones masivas por abuso sexual en contra de políticos, entre ellos senadores, líderes partidarios y un funcionario que se suicidó después de ser señalado.
La semana pasada, la actriz Thelma Fardín reveló, acompañada por la colectiva Actrices Argentina, que el actor Juan Darthés la había violado cuando ella tenía 16 años y él 45, durante una gira de la obra teatral “Patito feo” en Nicaragua.
El caso desató un intenso debate social sobre las violencias machistas y multiplicó las acusaciones por abusos sexuales o violaciones sufridas por miles de mujeres que por primera vez contaron sus historias de manera pública.
Una de ellas fue Marianela Sánchez, una mujer que contó, a través de un video publicado en redes sociales, que cuando tenía 13 años fue violada por Luis María Rodríguez, secretario de Deportes del municipio de San Pedro, ubicado en la provincia de Buenos Aires, cuando él era su profesor de danza.
El sábado por la noche, horas después de que la grabación se viralizara, Rodríguez se suicidó, lo que provocó una conmoción en San Pedro y demostró los alcances del “efecto contagio” que están teniendo las acusaciones.
Otros casos que se sumaron estos días fueron los de los senadores Juan Carlos Marino y Jorge Ramos, quienes fueron señalados como abusadores por parte de una empleada del Congreso y una militante.
Una trabajadora del Senado denunció penalmente que Marino, un senador oficialista, le tocó los pechos y la acosó preguntándole la dirección de su casa.
En el caso de Ramos, un senador opositor en la legislatura de la provincia de Buenos Aires, una joven que militó con él en la organización kirchnerista La Cámpora contó que la encerró en un baño durante una fiesta, le mostró su pene y quiso obligarla a que le practicara sexo oral.
La Cámpora es una agrupación dirigida por Máximo Kirchner, hijo de los expresidentes Néstor Kirchner y Cristina Fernández, y actual diputado nacional.
Las denuncias por abuso sexual y abuso de poder en contra de los dirigentes de esta organización se multiplicaron durante el fin de semana, e incluso la periodista Marisol de Ambrosio escribió una larga columna en la que detalló el machismo con el que operan los dirigentes.
Aunque los dos senadores acusados hasta ahora ya aseguraron que pedirán licencia en sus cargos y se someterán a una investigación, el alud de denuncias continúa y se prevé que en los próximos días alcanzarán a más funcionarios y líderes políticos. Buenos Aires (NOTIMEX)