Estados Unidos recibió su primera tormenta invernal del año, con fuertes vientos, tornados y nevadas que azotaron especialmente al centro y sureste del país y que dejan al menos tres muertos y cortes de electricidad que afectan a unas 300 mil personas.
Según medios locales, falleció una persona en el condado de Clayton (Georgia) al caer un árbol sobre el parabrisas de su vehículo; mientras se cobraron dos vidas sendos tornados en comunidades de viviendas prefabricadas, en Carolina del Norte y Alabama.
La tormenta afectó gravemente a Florida, donde 92 mil 935 personas se quedaron sin electricidad; también se vieron sin luz Carolina del Norte (63 mil 853), Georgia (62 mil 497), Pensilvania (47 mil 967) y Alabama (32 mil 389).
Las principales amenazas son fuertes ráfagas de viento, granizo y tornados; estos últimos mantienen en alerta el norte de Florida, el sureste de Georgia y gran parte de Carolina del Norte.
El Servicio Nacional de Meteorología reportó múltiples tornados en Florida, y los servicios de emergencia informaron de “importantes daños” en localidades como Panama City Beach o Bay County, donde se llegaron a derrumbar casas y se cortaron carreteras.
Fuertes nevadas cubrieron las áreas que van desde el norte de Texas hasta los Grandes Lagos, cerca de la frontera con Canadá, dejando a 18 millones de personas bajo alerta por la nieve.
Más de 40 millones de personas se encuentran en alerta por la tormenta, de acuerdo al Centro de Predicción de Tormentas, y alrededor de la mitad de la población está en alerta por las fuertes ráfagas de viento.
El riesgo de inundación se hace latente, hay fuertes lluvias, y los meteorólogos advirtieron que las tormentas pueden producir inundaciones desde Florida hasta el sur de Maine.
Bob Oravec, meteorólogo del Servicio Nacional de Meteorología, dijo que durante las próximas 24 o 48 horas las fuertes lluvias llegarán a los estados del este, y advirtió de un riesgo de inundación en áreas urbanas como Washington D.C., NY y Boston.
Las áreas que acumularon más nieve durante el temporal son las más vulnerables a posible inundación. Nueva York (EFE)
