El gobierno de Estados Unidos se prepara para un posible aumento de la violencia política una vez que el Tribunal Supremo publique su sentencia sobre el derecho al aborto, según circular del Departamento de Seguridad Nacional.
Todo apunta a que la sentencia, se conocerá a fines de junio, retirará la protección federal a la interrupción del embarazo. Los estados con gobiernos contrarios al aborto podrán prohibir el acceso a este derecho reproductivo.
Las amenazas contra miembros del Tribunal Supremo, legisladores y otros funcionarios “probablemente persistan y podrían aumentar”.
La defensa teórica de posiciones violentas o la expresión vehemente de posiciones políticas no son un delito. El Departamento defiende la protesta pacífica frente a la sentencia, como ha recalcado el presidente estadounidense ante críticas de varios políticos republicanos.
La circular aclara que podría haber violencia por motivos raciales con el objetivo de “salvar a los niños blancos” por parte de grupos radicales contra el aborto. Servicios de inteligencia de EEUU investigan amenazas a clínicas que ofrecen este servicio.
Un borrador filtrado por el propio tribunal apunta a la anulación de la sentencia “Roe contra Wade”, que protege el derecho al aborto en EEUU.
Miles de personas ha participado en protestas en varias ciudades, incluida Washington, y políticos republicanos anuncian su decisión de instaurar vetos totales al aborto en sus respectivos estados. Washington (EFE)
