Cuando aparezcan estas líneas ya habrá pasado la celebración de las Fiestas de Independencia en México, las cuales aunque a toro pasado hay que mencionar que sirvieron más que otra cosa para liberar a la plaza del zócalo de los maestros rebeldes, en donde, gracias a eso, como todos los años hubo la que llaman “La Fiesta del Pueblo”, pues como se ha hecho costumbre, el zócalo de la Ciudad de México se viste de gala, y como en todos los años, hay verbenas, fuegos artificiales el 15 de septiembre, Día de la Independencia, en el que el presidente en turno, en este caso Enrique Peña Nieto, desde el Balcón central del Palacio Nacional da el famoso Grito de Independencia, mientras el pueblo en general, sobre todo las clases más humildes acompañados por toda su familia, disfruta de lo lindo esta fiesta considerada la máxima fiesta del pueblo, en donde se sirven toda clase de antojitos mexicanos, y al día siguiente, o sea el 16 de septiembre, gozan de un esplendido desfile militar en el que todas las fuerzas armadas, desde el Glorioso Colegio Militar, hasta un ejército mostrando todos sus adelantes, desde el cuerpo de enfermeras hasta los batallones de paracaidistas hacen alarde saltando desde sus aviones para deleite, principalmente de los niños.
PERO... ¿Y LOS MAISTROS?
Pues nada, que finalmente bajo la consigna de “se quitan o los quito” finalmente el Gobierno Federal se fajó los pantalones y demostrando un poco de músculo, y en menos que canta un gallo, los maistros arriaron sus miles de carpas y en menos de ocho horas la explanada del zócalo quedó, no solo impoluta, sino lista para llevar cabo, no solo la llamada Fiesta del Pueblo, sino lista para el gran desfile militar que se llevó a cabo el 16 de septiembre como todos los años. Y lo que es mejor. Que cuando los profes vieron que la cosa iba en serio, ya no pusieron más objeciones, aunque no sabemos qué pasará después de las Fiestas Patrias, pues las nuevas Leyes de Evaluación Educativa, como hemos mencionado en otras ocasiones, ya fueron aprobadas por el Congreso, y ahora no les queda otra más que la bebes o la derramas. Y lo mejor de todo. No hubo el ansiado “muertito” que tanto buscaban para convertirlo en “víctima” y tener un pretexto más para hacer sus borlotes y manifestaciones.
Lo que ahora está por verse es qué pasará en sus lugares de origen, pues según reportes, los padres de familia, hartos de sus eternos paros y burrimaestros, manifestaciones y líderes charros, en algunos lugares ya se han organizado y están contratando maestros que deveras enseñan a sus niños. Pero sobre todo, que se dedican a educar y no hacer paros y manifestaciones con cualquier pretexto. Además de que todo parece indicar, que de acuerdo a lo dicho por el Secretario de Educación, de hoy en adelante, el maestro que no se presenta a dar clases, simplemente no cobra, pues como le hemos mencionado antes, todos los actuales paristas del zócalo, cobran sus sueldos íntegros, incluidos paleros y aviadores, más los bonos a que estaban acostumbrados. Ah! pa´cachaza.
Y pues ¿qué cree?, que de última hora se supo, que pasando las Fiestas del Grito y el Desfile Militar, los maestros se volverán a apoderar del zócalo, a sabiendas que en este caso la autoridad recae en el gobierno del Distrito Federal, en donde el Regente José Luis Mancera se ha negado a decir esta boca es mía, y se ha mostrado un tanto blandengue con la excusa de que no quiere derramamiento de sangre. Veremos en qué termina este molesto sainete.
RECIBIÓ UNA LECCIÓN DE BOXEO “EL CANELO”
Tal como lo temíamos, el joven Saúl “El Canelo” Álvarez recibió la cachetiza de su vida a manos Floyd Mayweather, aunque no gratis, pues a cambio de la lección de box recibió una carretada de varios millones de dólares, con los que si quisiera podría vivir cómodamente el resto de su vida, y decimos cachetiza porque afortunadamente Floyd Mayweather es un boxeador que es un maestro en el arte de Fistiana, que consiste simplemente en pegar, aunque sea con cachetadas, y no dejarse golpear, como lo ha demostrado en todas sus peleas. Todos los que saben un poco de boxeo sabían que simplemente el Canelo estaba a cientos de millas de distancia, como para enfrentarse a un boxeador de esa talla, aclarando que decimos boxeador, no fajador, con los que, debido a su pegada, El Canelo, tendría muchas más posibilidades. Pero los tiburones del dinero no tuvieron ningún empacho en lanzar al matadero al joven de pelo color canelo. Encima de eso, Mayweather siempre se prepara como si fuera a enfrentarse a Sugar Ray Leonard, o alguno de esos grandes.
Afortunadamente “El Canelo” a sus 23 años todavía tiene mucho que aprender, y lo menos que pueden hacer estos tiburones, es buscarle peleadores a su modo. Con razón el promotor, “El Golden Boy” De la Hoya, (y del dinero) ni siquiera se presentó para evitar una que otra mentada de madre.
Por otra parte ojalá mi compañero Francisco Alejandre le haga llegar esta columna a nuestro gran amigo Rafael García, quien gracias a Mayweather, que a leguas se nota como lo estima, logró emprender una nueva carrera al lado de este gran campeón, en la que, por lo menos en México le ha demostrado su amistad cada vez que salen en la Tele. En fin Rafa ya es toda una celebridad. Finalmente los que de plano no tienen madre son los jueces que juzgaron esa pelea, pues una de ellas tuvo el descaro de dar la pelea empatada, cuando todos sabemos que “El Canelo” no ganó un solo round. ¿O será para desde ahora promocionar el nuevo Robo del Siglo, perdón, la pactada pelea de revancha y engañar a los nuevos sayos? ¿Qué les parecen las Fiestas del 5 Mayo para presentar “La Gloriosa Revancha II?
Y ya seguiremos... Corro... borando.
