El bien que hemos hecho nos da una satisfacción interna que es la más dulce de todas las pasiones
René Descartes
El pasado lunes 13 se celebró en todas partes el ‘Día Mundial de la Bondad’, aunque han transcurrido algunas jornadas, se trata de algo significativo que no debe pasarse por alto, más que todo por lo que representa para el ser humano. Se trata de resaltar las buenas acciones.
Un viejo proverbio indio deja sentado que: “El bien que hicimos la víspera es el que nos trae la felicidad por la mañana”. Nada más apegado a la realidad, pero... ¿qué es la bondad?
Muchas personas coinciden en que la bondad es una tendencia natural de hacer el bien y se aplica en el carácter o en la acción que indica ser bueno. Un ser bondadoso tiene como característica promover -mediante acciones-, actos de ‘bondad’ hacia quienes le rodean... bondadoso es aquel que es benevolente y ayuda al necesitado.
La bondad no tiene en lo absoluto nada que ver con la edad o el sexo, quiere decir que un hombre, una mujer, un niño, pueden practicar la bondad, se puede apreciar en aquellas acciones en las que las personas se interrelacionan y el uno da entender al otro, mediante su comportamiento, que tiene buenas intenciones para con él. No es descabellado apuntar que también se puede ser generosos con un animal.
No se es bondadoso, por ejemplo, teniendo o realizando buenas acciones esperando algo a cambio, eso, sencillamente es otra cosa. La bondad es la disposición permanente para hacer el bien, de una forma amable y generosa, las personas bondadosas sienten un gran respeto por quienes realizan la acción, lo conozcan o no.
No es extraño que el bondadoso (a) protagonice un gesto de bondad sin darle mucha importancia, sin reparar en la magnitud de su acción, con el mayor desinterés, sólo lo anima ayudar, hacer el bien.
Es relevante tener en consideración que la bondad es un valor que ‘habita’ en los seres humanos y se define sobre todo como una tendencia natural por hacer el bien, materializándose en todas aquellas acciones que se puntualizan como buenas. La bondad es un sentimiento genuino por ayudar, acompañar y cuidar a quienes lo necesitan, sin esperar nada a cambio, y esto último concede mayor valor a la acción.
La bondad es la voluntad de celebrar los éxitos de otra persona, también se trata de decir la verdad de una manera gentil cuando, transparente, sin dobleces o mezquinas intenciones.
Se considera una virtud, no por gusto la bondad es reconocida en muchas culturas y religiones como uno de los mayores valores humanos.
Sirvan estas líneas como motivación para poner en práctica la bondad, con el propósito marcado de conseguir la satisfacción espiritual, esa que ayuda tanto a la salud, tener la conciencia tranquila porque se ayuda a alguien en un momento difícil, cuando esta persona más lo necesitaba... es una acción, sin dudas excelente, con la facultad de hacer mejores seres humanos.
