Harry Reid propone acabar con la vergonzosa mutilación genital femenina

El líder demócrata del Senado Harry Reid hizo las siguientes declaraciones en el pleno del Senado sobre un nuevo reporte de la Oficina de Supervisión del Gobierno que destaca los limitados esfuerzos de Estados Unidos para acabar con la mutilación genital femenina por todo el mundo. El senador Reid también escribió una carta al secretario de Estado, John Kerry, y a la administradora de la Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), Gayle Smith, instándolos a hacer más para ponerle fin a esta práctica. A continuación, apartes de su discurso:  

“Hoy, vengo al pleno del Senado para hablar, no sobre un tema político -no de demócratas contra republicanos- sino sobre un tema difícil y delicado.  

“Han pasado más de 20 años desde que por primera vez escuché sobre la mutilación genital femenina, también conocida como FGM (por sus siglas en inglés). Desde entonces he denunciado a menudo este procedimiento y sus devastadoras consecuencias en mujeres y niñas por todo el mundo.  

“Algunas personas me advirtieron hace 20 años, que este no es un tema del que debería hablar, que era tabú. Pensaban que no era apropiado que lo hiciera, pero les dije que tenía que hacerlo porque nadie estaba hablando de ello. Así que seguiré haciendo todo lo que pueda para crear conciencia sobre este problema y luchar para acabar con esta horrible, atroz, brutal práctica en contra de mujeres y niñas.  

“Hay diferentes formas de mutilación genital femenina en todo el mundo. La más severa y atroz es una en que los genitales de las niñas son amputados y las niñas son  literalmente cosidas, dejando solo una pequeña abertura para la orina y la sangre menstrual.  

“Aunque hay muchas formas de mutilación genital femenina por todo el mundo, hay algo muy claro: esta práctica es usada para controlar y oprimir a mujeres y niñas. Más allá del impacto fisiológico, esta forma de violencia tiene serias consecuencias médicas, incluyendo la muerte. Es reconocida por las Naciones Unidas como una violación a los derechos humanos, y debe serlo.  

“A dos décadas de que me enteré de esta práctica, mujeres y niñas todavía siguen siendo cortadas, mutiladas.  

“Esta práctica sigue siendo muy común en al menos 30 países. En algunos lugares, el número de mujeres y niñas afectadas llega al 90 por ciento. En muchos de estos países, la mutilación genital femenina se practica en niñas menores de 5 años. En la mayoría, este procedimiento se lleva a cabo entre la niñez y los 14 años. Imagínense eso. Niñas que ni siquiera han entrado a la escuela, niñas de kínder o más pequeñas, están siendo sujetas a este horror.  

“Debido a estos millones de niñas, he dedicado más de 20 años tratando de hacer algo al respecto. He trabajado arduamente para aprobar legislación prohibiendo esta práctica en Estados Unidos y la práctica conocida como “vacation cutting”, cuando las niñas son enviadas al exterior para ser mutiladas. Obviamente, estas medidas contaron con apoyo bipartidista. Este no es un tema partidista. Y logramos varias victorias, pero no suficientes. Esta sanguinaria práctica continúa por todo el mundo, y es muy claro que debemos hacer más. 

“Por eso pedí a la Oficina de Supervisión del Gobierno (GAO, por sus siglas en inglés) que llevara a cabo un estudio sobre los esfuerzos del gobierno estadounidense para poner fin a esta práctica. La GAO ha completado el reporte sobre los esfuerzos a nivel internacional de nuestro gobierno.

 

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